Nos preocupamos de la seguridad de los coches, de la casa, del cuarto de baño, pero hemos pensado alguna vez de la seguridad de nuestro jardín. Sí, efectivamente, de nuestro jardín, y más aún si existen niños. Debemos de ser conscientes de los peligros que puede acarrear.
Más que normas, vamos a hablar de prevenciones que hay que tomar cuando tenemos un jardín, y por él, caminan o juegan nuestros hijos. Una práctica muy habitual sobre todo en verano.
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- Seguro que nos gusta decorarlo con hamacas, toboganes o columpios. Pues bien, deberemos comprobar de manera perfecta que todo está anclado al suelo, y que pese al mal uso que se puede dar por parte de los más pequeños van a aguantar. Sin olvidarte de que el anclaje de estos artefactos, es decir su fijación al terreno es tu responsabilidad. En todos los casos, deberías tomar las precauciones que sugiere el fabricante y sumarle las que provengan de tu sentido común y tu experiencia.
- Otros consejos que te podemos dar son que evites el jardín, si es posible, cuando las condiciones climatológicas son adversas y el suelo esta helado o resbaladizo. Por supuesto, no uses equipos eléctricos nunca en caso de lluvia y además, no dejes las herramientas de corte o poda sin guardar. Mantenlas alejadas de los niños
- Si tienes la fortuna de tener piscina, es cuando más precaución tienes que tener. Un buen vallado, con sistema de cierre, evitará problemas mayores. Y es que, aunque suene fuerte, cada verano son muchos los niños que mueren ahogados en las piscinas por culpa de los despistes de los mayores.
En otros casos, muchas casas o chalets se abastecen de agua que procede de pozos. Esto es palabras mayores. Por supuesto que hay que tomar muchas medidas de seguridad con esto. Una gran idea es utilizar barandillas de seguridad. La empresa Seguridad Colectiva cuenta con todo mi respeto y admiración, ya que en otras ocasiones he trabajado con ellos.
- Utiliza el equipo de seguridad, tales como gafas, cascos, guantes y botas de seguridad, cuando estés usando maquinaria en tu jardín. Y si te decides a hacer una barbacoa, nunca dejes desatendida una barbacoa y asegúrate de que las llamas se extinguen y apagas completamente, antes de irte a la cama.
Presta atención a estas recomendaciones y no te arrepentirás y tendrás el jardín más seguro para tus hijos.