¿Por qué, si te preocupas por dar a tu hogar un toque personal, no haces lo mismo con el jardín?
Ay, el olvidado jardín… Y es que siempre lo tenemos hecho un auténtico desastre, ni de cortar el césped a tiempo, nos acordamos. Que si la piscina sucia, la mesa y las sillas con la pintura desconchada, una piedra que hace de mesa auxiliar, esas hamacas descoloridas, y ni un miserable farolillo mono que alumbre con su brillante luz de colores. Esta es la realidad de nuestros jardines, y pocas personas son las que de verdad se empeñan en dejarlo bonito, y en convertirlo en ese espacio reservado para relajarse y meditar.
Tener un jardín en casa es una suerte que solo algun@s afortunad@s tienen, y es una pena no disfrutarlo, no valorar ese pequeño trozo de naturaleza que guardamos en nuestro hogar. Porque un jardín cuidado, puede ser el mejor lugar de todos, un lugar en el que poder estar a solas con un@ mism@, donde compartir aventuras con la familia y l@s amig@s, donde hacer fiestas y celebraciones con los nuestros.
Que han sido de esos tiempos, cuando éramos niñ@s y no veíamos el momento de salir al exterior, de jugar al aire libre. Sería bueno hacer un ejercicio de memoria, volver atrás, a esa época de la infancia en la que sabíamos disfrutar de las pequeñas cosas, en que la que nos sentíamos más viv@ en contacto con la naturaleza y conseguíamos olvidarnos de todo lo malo. Y por mucho que l@s niñ@s de hoy no sean los mismos que los de ayer, lo cierto es que hay cosas que nunca cambian, y la relación de l@s más peques con la naturaleza siempre ha sido muy especial, así que si no lo hacemos por nosotr@s, hagámoslo al menos por ell@s.
¿No te están entrando ganas de empezar a decorar el jardín, de retirar la porquería acumulada y de plantar flores y más flores?, ¿no te gustaría ver a tus peques corretear por un jardín cuidado? Incluso podrías empezar a cultivar tu propia huerta. Ni te imaginas la de posibilidades que puede ofrecer un espacio verde por muy pequeño que sea… Así que continúa leyendo, a lo mejor podemos ayudarte.
Lo que más se lleva en 2017
Este año, las estridencias, se han quedado fuera para dejar paso a la sobriedad y elegancia de los colores neutros, siempre intemporales y mucho más fáciles de combinar. El gris, el beige, el blanco, se mezclan con naranjas y verdes en perfecta armonía con la naturaleza.
Lo rústico, lo natural, lo reciclado, están de moda hoy más que nunca, quizás en un deseo de conservar algo de una época pasada en un mundo tecnológico y cambiante como este, en un intento de sentirnos un poco más seres humanos y no autómatas, víctimas del sistema capitalista y de la publicidad, en un mundo sin valores ni principios, en una sociedad deshumanizada.
Por otro lado, cada vez son más los consumidores y consumidoras que apuestan por empresas que promuevan modelos de gestión sostenible, como lo hace, por ejemplo, Dismobel, que consciente de la repercusión de su actividad en las nuevas generaciones, apoya a todos los fabricantes de bosques gestionados de forma sostenible y con certificación por organismos independientes. Además, ofrecen el mejor mobiliario de jardín, el más actual, y de la mano de l@s mejores diseñadores y diseñadoras. En su amplio catálogo de muebles cuenta con una selección de muebles de jardín para todos los gustos y necesidades, desde los estilos más clásicos a los más vanguardistas y actuales. Y por supuesto, todo su mobiliario tiene unos precios realmente competitivos que se ajustan a cualquier bolsillo, sobre todo ahora que dispones de una gran variedad de productos rebajados para cualquier estancia de la casa.
