Hoy vamos a daros algunos consejos para que podáis construir vuestro propio espacio de relax en el jardín. Me he puesto en contacto con el que, en mi opinión, en el mejor gabinete de psicólogos en Zaragoza, el cual os recomiendo, para que me ayuden a elaborar un plan de acción para poner en marcha el rincón del relax, como lo he llamado, y no sólo se han mostrado colaboradores y encantados de ayudar sino que además me han asegurado que la idea es estupenda para que la sociedad la lleve a cabo en cada uno de los hogares porque puede ser muy beneficiosa.
Dicho rincón puede hallarse tanto en el interior como en el exterior pero como aquí hablamos de jardines nos hemos centrado en el exterior pero si queréis ideas no dudéis en acudir a Marisa Henrnñandez Torrijo porque con que os traten la mitad de bien que a mí cuando busqué ayuda notaréis lo que es ser bien recibidos.
Veamos, para empezar os recomiendo que os hagáis con una pérgola o un buen toldo que, además de resguardaros del sol en los días más calurosos del verano, os sirva como aislante, como separador entre lo ajeno a vosotros y vuestro interior. Podéis encontrar muchos en Toldos Clot por ejemplo, pero seguro que si buscáis un poco encontraréis buenas referencias en Internet.
Otra cosa con la que os tenéis que hacer es con una tarima. Algo que os aísle del frío y húmedo suelo porque depende de donde viváis puede ser un gran alivio libraros de esa sensación cuando tenéis que relajaros. Podéis hacerlo vosotros mismos con láminas de madera pero si no queréis complicados pensad en un aislante térmico de acampada, también es una buena opción.
Una vez construida la base y el toldo viene lo bonito, decorar al gusto. Para conseguir que sea vuestro rincón de relax perfecto poned las plantas que más os gusten alrededor. Pensad que queréis relajaros así que olvidad las rosas rojas y amarillas y cosas pos el estilo y pensad en verde y tonos pálidos o pasteles para las flores si es que ponéis alguna. El blanco también es una buena opción.
Comprad o haceos con una hamaca cómoda, una tumbona o un sofá de exterior de mimbre o algo parecido que se mantenga perfectamente ante las inclemencias del tiempo porque la idea de poner un juego de mesas y sillas de metal forjado como he visto en algunas terrazas puede quedar muy bien pero cómodo no es, os lo aseguro.
Pensad también en que, si queréis estar allí por la noche, tenéis que poner una buena iluminación. Si no tenéis modo de hacer llegar la electricidad hasta allí una buena opción son los faroles de velas porque os ofrecen una luz tenue e incluso romántica con la que poder estar allí cómodamente, eso sí, si pretendéis leer allí algún libro buscad el modo de haced llegar electricidad o poned una batería porque si no os podéis estropear la vista leyendo a la luz de las velas.
Otra buena idea es poner alguna mantita al alcance para las noches que refresquen y si tenéis algo de dinerito ahorrado y podéis poner una barbacoa tendréis el lugar perfecto para pasar los domingos.