Podríamos medir la calidad de vida de la gente de muchas maneras. Algunos suelen hacerlo en dinero, otros suelen tener más en cuenta el tiempo libre y algunos otros prefieren, antes cualquiera de esas dos cosas, hablar de la vivienda de la que se dispone para valorar un asunto como del que estamos hablando. La verdad es que cada cual tiene su criterio, pero es cierto que cualquiera de estos asuntos tiene su valor a la hora de emitir un veredicto al respecto. Y para mucha gente, una combinación ponderada de los tres elementos es lo que determina la calidad de vida.
Sí que es cierto que esa ponderación de cada uno de los valores va cambiando. Ha habido momentos en los que el tiempo libre ha sido más importante para determinar no solo nuestra calidad de vida, sino también nuestra felicidad. En los tiempos que corren, a causa de la pandemia que nos asola desde el año pasado, ha crecido la importancia que muchas personas le otorgan a la vivienda en la que residen de manera habitual. Cuanto más espacio, más bienestar. Y viceversa. Vivir en espacios reducidos es síntoma de estrés y eso lo han hecho notar los psicólogos en los últimos tiempos.
Una noticia que fue publicada en la página web especializada en vivienda Idealista indicaba que un 64% de los ciudadanos de nuestro país vive en pisos, especialmente a causa de la cantidad de personas que viven en lugares urbanos. Además de ello, un 21% de la gente vive en chalets y un 14%, en viviendas unifamiliares. Si hiciéramos un estudio acerca del bienestar de cada uno de esos grupos, probablemente veríamos claramente diferenciados estos grupos. No cabe la menor duda de que quien vive en un piso tiene menos motivos para sonreír a este respecto.
Otra noticia, en este caso propiedad de El Confidencial, indicaba que la casa ideal de los españoles es un chalet que cuente con un total de 167 metros cuadrados y que disponga de garaje, piscina y jardín. Como veis, es evidente que el espacio es un arma realmente interesante a la hora de determinar si el lugar en el que vivimos es de nuestro agrado o no y para tener claro si nos ayuda a alcanzar esa felicidad. Es evidente que muchas personas pueden ser felices sin necesidad de todos esos espacios que hemos comentado pero, en general, la verdad es que la comodidad crece cuando lo hace el espacio en el que nos solemos encontrar.
Cuando pensamos en comodidad en el hogar, siempre nos solemos imaginar vivir en un lugar tranquilo, amplio y, sobre todo, rodeado de algún jardín. Este último aspecto es sinónimo de tranquilidad y, en muchas ocasiones, de diversión puesto que es el lugar en el que se puede ubicar una piscina. Los profesionales de Planit Arquitectos Técnicos nos han indicado, en una charla reciente, que ha crecido el porcentaje de personas para las que disponer de jardín y piscina es necesario para garantizar su bienestar, su calidad de vida y, por ende, su felicidad.
Un lugar ideal para los más pequeños
Ni que decir tiene que, para los niños y niñas, un jardín puede ser el lugar de sus sueños. En primer lugar, porque tendrán todo el espacio del mundo para corretear y para jugar, algo que todos los expertos catalogan como básico en la infancia de cualquier persona. Pero es que, al mismo tiempo, este tipo de espacios puede ser ideal para la primera toma de contacto entre el o la menor con la naturaleza, una relación que necesitamos que se establezca entre todos los menores para que, así, crezcan sabiendo que es necesario cuidar del medio ambiente para garantizar la vida del ser humano.
Por desgracia, no todo el mundo puede aspirar a este tipo de espacios. España es uno de los países de la Unión Europea en los que más difícil está cumplir este objetivo puesto que solemos vivir en ciudades que no cuentan con todo el espacio que nos gustaría y en las que lo más habitual es residir en pisos y comunidades de vecinos que, aunque tienen piscinas en las zonas comunes en muchos casos, no están a la altura de la tranquilidad y el bienestar que puede proporcionar un chalet.
En todo caso, ha quedado claro que el espacio de la vivienda juega un papel muy importante, por no decir que juega el papel más importante de todos, en lo que tiene que ver con la felicidad y el bienestar de las personas. Para mucha gente, le ha ganado la partida al tiempo libre (no sirve de nada tener mucho tiempo libre si vamos a estar a disgusto en nuestro hogar, el lugar donde lo solemos disfrutar) e incluso al dinero, aunque a nadie se le escapa que espacio en el hogar y dinero tienen algo que ver.