Muchos de nosotros somos habitantes de ciudades, ya sean estas más grandes o más pequeñas, pero urbes, en definitiva. Esto se debe a que en las últimas décadas hemos vivido un gran éxodo rural que ha vaciado gran parte de nuestros pueblos y los habitantes que en ellos había se han ido para las ciudades. Esto es así puesto que en las grandes urbes es mucho más fácil encontrar empleo, así como también se debe a la necesidad de los más jóvenes de seguir estudiando para formarse en lo que siempre han querido ser y que, por desgracia, en sus poblaciones no lo tienen a su disposición.
